La oración es un vínculo que se establece entre el corazón del hombre que busca, y el Corazón de Dios que se muestra. Este diálogo de amor que se forma desde la experiencia humana, viene a ser la respuesta natural que toda persona de fe necesita dar a su propia vida, y aunque no sepa como, la mayoría de las veces ya lo está buscando, e incluso en muchos casos haciendo. En este apartado, queremos ofrecer recursos para profundizar en esta senda por la que encontraremos una paz enorme en nuestras vidas. Son varios los modos en los que se van a ofrecer los recursos, pero lo más importante no es la forma, ni el contenido, sino los frutos que se obtienen
¿Quien dice la gente que soy yo? De la respuesta que tu y yo le demos, dependerá lo…
Comentario al evangelio de este domingo donde Carmen Fernández Luna nos propone un ejercicio de imaginación para que…
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